- Las consecuencias forestales del abandono rural son las masas inestables, vulnerables a perturbaciones, poco diversas…la gestión forestal supone conseguir masas más vitales y diversas con mayor resilencia a perturbaciones como plagas, incendios, vendavales, etc.
- Convencimiento de la necesidad de fomentar los aprovechamientos energéticos para movilizar la madera de baja calidad, consiguiendo de este modo que se libere su energía dentro de una caldera y no en un gran incendio.
- La reintroducción del fuego por medio de cremas controladas y mediante la monitorización de incendios de baja intensidad tiene que corregir el exceso de combustible forestal que se está acumulando en los bosques y que incrementan el riesgo de grandes incendios.
- La auto-protección de las viviendas e infraestructuras ubicadas en zonas de alto riesgo de incendios forestales es actualmente imprescindible, debido a que los cuerpos de extinción no pueden garantizar la protección de estos elementos cuando el incendio es de grandes dimensiones.
- La evaluación y la gestión del riesgo del arbolado urbano es una necesidad debido a la gran demanda de espacios verdes seguros y de calidad a las zonas densamente pobladas.